Hablamos con Romi Ivars, una paciente que fue intervenida de columna en Instituto Clavel con el robot quirúrgico Mazor. Esta tecnología aumenta la precisión y optimiza la cirugía.
Romi Ivars llevaba sufriendo dolor mucho tiempo, probó diferentes tratamientos conservadores, pero no mejoraba. En 2020 ya no aguantaba más y consultó en nuestro centro, donde tras analizar su caso de forma personalizada, se indicó la cirugía.
La intervención se llevó a cabo con el robot Mazor, que garantiza la precisión en la colocación de los implantes, reduce el riesgo de infección y también el dolor posoperatorio, por lo que la recuperación suele ser más rápida. Romi Ivars nos cuenta su experiencia y cómo se encuentra actualmente.
¿Cómo empezó tu dolencia?
Llevaba años con muchos dolores, sin poder dormir y solo había ido a traumatólogos, no sabía la posibilidad de ir a un neurocirujano, hasta que conocí a Instituto Clavel a través de unas amigas.
Me jubilé justo antes de la pandemia y fue el momento porque estaba harta de no poder descansar por las noches.
¿Sobre todo te dolía por las noches?
Dolores tenía siempre, pero cuando me estiraba, era insoportable.
¿Te costó tomar la decisión de operarte cuando acudiste a Instituto Clavel?
La verdad es que no, ese mismo día lo decidí. Cuando el Dr. Clavel me explicó cómo era la cirugía, que además era con el robot, mucho menos invasiva y precisa, con una recuperación más rápida, lo tuve claro.
Es cierto que yo siempre había ido a traumatólogos y la recomendación era que aguantara el dolor hasta que no pudiera salir a la calle. Me recomendaban fisio, infiltraciones, osteópatas… He probado todo, pero no funcionaba. Así que en este caso el enfoque era totalmente diferente.
Sí que salí un poco aturdida de la consulta por toda la información y porque en ese momento no podías ir con acompañante a la consulta. Así que si se te escapaba algo, no había otra persona para “pescarlo”.
¿Cómo fue el día de la cirugía?
Como decía, era época covid, así que el día de la cirugía solo estaba mi marido. Me daba miedo porque nunca me había operado, pero fue todo muy bien. Al día siguiente ya estaba levantada y eso me sorprendió y a la vez me tranquilizó poder caminar aunque fuera unos pasos por la habitación.
Es cierto que por la pandemia todo era más frío en cuanto al trato, todos teníamos miedo de contagiarnos, yo misma precisamente en esa situación. De todos modos la Dra. Varela fue un encanto y en general me cuidaron muchísimo.
Del robot, evidentemente, no recuerdo nada, solo sé que estaba y que fue más precisa gracias a él.
¿Cómo fue la recuperación?
Fui a Instituto Clavel Rehabilitación desde marzo hasta junio tras la cirugía y muy bien. En ese momento me daba miedo “romperme”, pero la evolución fue muy buena. Creo que he sido bastante buena alumna en el centro, y aunque lo hago menos, sigo haciendo ejercicios.
¿Cuánto tardaste en recuperar tu rutina habitual?
Fue muy rápido, un mes o algo así. Una gozada, la verdad. En el hospital estuve más de 10 días porque pilló en Semana Santa, tardé en salir, lo cual me fue muy bien. A la que salí del hospital yo ya quedaba con mis amigas para vernos. Sí que hacía más reposo en casa, pero yo salía a andar cada día.
No cargaba peso, pero caminaba y, de hecho, iba al centro de rehabilitación andando cada día. Y aunque al principio vas con más cautela, la verdad es que no iba lenta, iba bastante rápido, como suelo caminar habitualmente. Mi marido siempre me dice que yo no sé pasear [risas].
Ahora practico yoga y aunque tengo que ir con cuidado porque hay posturas que son fuertes, en general muy bien.
¿Tenías alguna molestia tras la cirugía?
Después de la cirugía tenía otros dolores y fui a otro doctor especialista en cadera, que me diagnosticó una displasia, que probablemente fue el origen de mi disfunción en la columna. Nadie me lo había visto. No me recomendó cirugía por la edad, en ese caso lo mejor son las infiltraciones y bueno, lo llevo muy bien porque lo que realmente me provocaba dolor era la columna.
¿Cómo te sientes ahora?
Estoy muy bien, muy contenta, tanto que lo recomiendo siempre que hay alguna persona en una situación similar.
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