La sacroileitis es la inflamación de la articulación sacroilíaca. Generalmente, produce dolor lumbar, por lo que es habitual que se confunda con lumbalgia. Si te la han diagnosticado o tienes alguno de estos síntomas y te preguntas si es posible trabajar con ella o no, sigue leyendo.
La articulación sacroilíaca es la que une el hueso sacro con el hueso iliaco de la pelvis y tenemos dos, una a cada lado. Aunque se la denomine articulación, en este caso su función no es el movimiento, sino la transmisión del peso de la parte superior del cuerpo hacia la pelvis y ambas piernas.
Cuando esta se inflama o hay un problema de mala función mecánica se produce una sacroiletis, que provoca dolor en la zona lumbar baja o dolor que se irradia fundamentalmente a un glúteo, aunque puede también irradiar hacia alguna zona de la pierna y recordar a una ciática.
La similitud con estas otras patologías y el hecho de que es difícil confirmar el diagnóstico mediante una prueba radiológica que indique que la zona está afectada, son la causa de que entre un 15 y un 20% se confundan con lumbalgia. De esta forma, para detectarla es fundamental basarse en el diagnóstico clínico y la infiltración.
¿Es posible trabajar con sacroileitis?
Debido a la dificultad de diagnóstico de la sacroileitis, es habitual que los pacientes que la padecen lleven un largo periodo sufriendo dolor y que este afecte a su calidad de vida, incluyendo la incapacidad permanente o temporal para desarrollar con normalidad sus actividades laborales. Además, estos dolores de espalda suelen ser más intensos que los que se producen por una patología discal.
No obstante, no hay una respuesta rotunda ante esta pregunta, ya que esto dependerá de la fase de la patología en la que se encuentre el paciente, la causa que lo ha provocado, su estado de salud general y del tipo de profesión que realice, entre otros factores.
Será el especialista, en función de los síntomas del paciente y de lo que hemos mencionado, el que determine si es necesario que detenga la actividad laboral y durante cuánto tiempo, también teniendo en cuenta tratamiento que requiera, ya que, como veremos más adelante, este puede ser conservador o quirúrgico.
Síntomas de la sacroileitis
El principal síntoma de esta patología es el dolor, que suele ser bastante intenso. No obstante, la zona en la que se produce puede variar:
- Lumbalgia baja unilateral
- Dolor que se irradia hacia la ingle o la cadera
- Dolor que se irradia a glúteo
- Con menor frecuencia dolor que se irradia hacia la pierna por el territorio de algún nervio como en la ciática
Estos suelen manifestarse especialmente al sentarse, al subir escaleras, al estar de pie durante mucho tiempo, al rotar y al tumbarse sobre el lado afectado, por lo que es habitual que los pacientes se quejen de dolor nocturno.
Tratamiento de la sacroileitis
El tratamiento de esta dolencia puede incluir desde terapias conservadoras hasta la cirugía, dependiendo de cada caso. Entre las opciones conservadoras, se incluyen las siguientes:
- Fisioterapia para fortalecer los músculos de la pelvis.
- Cinturón de cierre pélvico.
- Infiltración.
- Radiofrecuencia o rizólisis.
Si estas alternativas no son efectivas, el especialista puede recomendar la cirugía de fusión sacroilíaca. En el vídeo que ves a continuación, nuestro neurocirujano especialista en esta patología, Ignasi Català, explica con más detalle la dolencia, en qué consiste la operación y cómo mejora la vida del paciente gracias a ella. Un tratamiento que es bastante reciente, pues fue descrito por primera vez en 2008.
Desde Instituto Clavel esperamos haber resuelto tus dudas sobre esta patología y te recomendamos que, en caso de padecer los síntomas mencionados, acudas al especialista cuanto antes para poder solucionarlos. Por supuesto, si necesitas atención personalizada, te animamos a que contactes con nosotros para explicarnos tu caso, ¡estaremos encantados de atenderte!
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